TTF

A las cuatro y media de la tarde del pasado viernes, con lo básico para
pasar un fin de semana en la naturaleza, y la ilusión de Abel por
correr su primer trail nocturno, iniciamos viaje a tierras albaceteñas. 

 

Tres horas después llegamos
a nuestro destino. Un pequeño albergue, cerca de Yeste y a orillas del rio Tus, que da la bienvenida a los 38 intrépidos que participarán durante todo el fin de semana en el primer Tus Trail Festival.  Se respira buen ambiente, y ganas, muchas ganas.

Antes de la esperada cita de las diez de la noche, montamos la tienda, merendamos, y recogemos los imprescindibles: El dorsal y la camiseta! Bueno, y todo el kit del corredor. De fondo, música, como todo festival que se precie.

Falta poco para la hora h, y se mezcla la incertidumbre con la adrenalina. La gente parece muy preparada. Abel conoce cara a cara a Charly, su nuevo amigo del blog "a correr", corredor de Villena y simpático compañero en este reto.

 

Más tarde y justo antes de la carrera, asistimos a una pequeña charla técnica en la que se explica que serán 5 km de subida cruzando pequeñas aldeas, para después en continuo descenso llegar a la meta, en el albergue de nuevo. Se remarca que es muy, pero que muy fácil perderse. 

 

Calentamos, listos, ya! Abel sale corriendo con el grupo. Por delante, esos 12 km por la montaña con la única ayuda de sus frontales y su ilusión. Yo aplaudo. Y a esperar.

Una hora y siete minutos después aparece el primer corredor, Alberto. Comenta que es su primera carrera por montaña y acostumbrado a correr por asfalto o pista, le maravilla la sensación de libertad. Y ya avisa, él iba detrás de otro al que no ha adelantado, y si no ha llegado antes que él, quiere decir que el que iba primero  se ha perdido. Muchos otros  comentarán después entre risas y rabia los km de más que han hecho al haberse perdido.

 
Tan solo trece minutos y once corredores después de Alberto, llega Abel. Sonriente, satisfecho, feliz. En su cara no se adivina el esfuerzo. Está contento. Buenas sensaciones corriendo y carrera disfrutada. Destaca sobretodo el compañerismo entre corredores. Y se sonríe al recordar por un lado las abuelas de las aldeas animándoles y por otro los momentos en que se han perdido y luego han reencontrado las ansiadas balizas.

Y una vez cumplida la misión, momento entonces para el baño. Que suerte tener una piscina a la que tirarse! Y ya fresquito, a cambiar impresiones con los compañeros y a devorar dos platos de pasta!!

Y así termina el día. Y para Abel su reto. Una gran parte de los participantes correrán al día siguiente 24 km, salvando mil metros de desnivel para hacer cumbre en el pico Mentiras. Nosotros la haremos también, pero andando, sin prisas.

Esta ha sido la primera carrera de un miembro del G.D. Pollito fuera de los límites alicantinos. Por delante esperamos que vengan muchas más. Absolutamente recomendable, y más si son en un entorno como este.